Así es como cambias tu mente
Sonriendo dulcemente, el Espíritu Santo,que es todo lo que tú eres, esperando por ti mismo,
en un conglomerado total al final del tiempo, percibe la causa y no presta atención a los efectos.
¿Lo ves? El ha llegado a una inclusión de todas estas formas de pensamiento perceptivo en tu
mente. ¿De qué otra manera podría corregir tu error, cuando has pasado por alto
la causa enteramente? Él te exhorta a que lleves todo efecto temible ante Él para que
juntos miren su descabellada causa y se rían juntos por un rato. Tú juzgas los efectos,
porque ellos están en tu mente pero, una mente íntegra, tu propia mente íntegra, esta
mente, ha juzgado su causa. Y mediante Su juicio se eliminan los efectos.
Así es como cambias tu mente. Tal vez vengas con los ojos arrasados en lágrimas, mas óyele decir:
“Hermano mío, santo Hijo de Dios, contempla tu sueño fútil en el que algo así podría ocurrir”.
Y saldrás del instante santo riendo, con tu risa y la de tu hermano unida a la Suya.
Y lo hiciste. Y ese fué el instante santo de la resurrección.
¡Y la tierra no fue más! ¡Y el tiempo había acabado!
La Realidad de la Resurrección Física.