Recuerda tu verdadera identidad
Lo que tú recuerdas forma parte de ti. Pues no puedes sino ser tal como Dios te creó. La verdad no lucha contra las ilusiones ni las ilusiones luchan contra la verdad. Las ilusiones sólo luchan entre ellas. Al estar fragmentadas, fragmentan a su vez. Pero la verdad es indivisible y se encuentra mucho más allá de su limitado alcance. Recordarás lo que sabes cuando hayas comprendido que no puedes estar en conflicto. Una ilusión acerca de ti mismo puede luchar contra otra, mas la guerra entre dos ilusiones es un estado en el que nada ocurre. No hay ni vencedor ni victoria. Y la verdad se alza radiante, más allá del conflicto, intacta y serena en la paz de Dios.
Cap. 23 S.I